Hoy comienzo este viaje,
No se si para olvidarte o seguir recordando mi amor.
Apenas apoyo mi espalda en la butaca del tren se que no dormire, y eso me conderaná a pensarte con lucidez de día y de noche.
Las nubes intrepidas, atrevidas intentan dibujar tu nombre, desprolijo y con faltas de ortografías,
Se nubla la vista y una lágrima madrugadora intenta treparse en mi mejilla, escurro la angustia con el dedo índice, tratando de no correr el maquillaje que esconde en bolsas moradas el precio de amarte en noches ausentes.
El vaivén del vagón en movimiento mese mi imaginación, un zorzal en el cable del telégrafo atento observa mi reflejo en la ventana, el humo de la locomotora tiñe de gris el cielo, recuerdo como me gustaba caminar bajo la lluvia.
Corren en sentido contrario los arboles del paisaje, seguramente detras de mi niñes en donde me sentí feliz.
Entro por fin en un paisaje desconocido, mis ojos con ansías intentan ir más adelante que la velocidad del pensamiento, quizás haya algo nuevo esperando por mi, allá, un poco mas adelante.
Pero quien me hará sentir tus beso,
quien expelará tu olor
tu sabor, fruta prohibida.
quien?
El amargo recuerdo tuyo invade mi boca, trago la desesperanza de haberte amado ciegamente, se que sera difícil olvidarte.
Hoy comienzo este viaje, no se si para olvidarte o seguir recordando mi amor, propio.